sábado, 20 de febrero de 2010

There is a light that will never goes out



Eran las 2:35pm del 11 de Febrero del 2010 cuando recibì tu llamada. Yo andaba algo ocupado cuando respondì el telefòno.

-Buenas tardes de encuentra...?
-Sì, de parte de quien?
-De Rafaella
-Rafaella Rivas?? no lo puedo creer!, què ha sido de tu vida mujer!
-Estoy en lima y cerca a tu casa...

Faltaron tan sólo dos horas para que toques mi puerta pues te dije que ese era el tiempo que me tomaría terminar lo que estaba haciendo en esos momentos. Sólo dos horas que pasaron como dos segundos por mas ilógico que suene (pues se supone que cuando uno se encuentra ansioso el tiempo pasa lento).

Terminaba de ducharme cuando escuché sonar el timbre en el segundo piso. Sabía que eras tú, pues nuestra comunicación va mucho más allá de lo "normal" y lo sabes. Me apuré en ir a mi cuarto y ponerme algo de ropa lo màs rápido posible mientras escuchaba un : "apurate gordo que me estoy aburriendo, si sabía que te ibas a cambiar esperaba en tu cuarto", para responderte con un: "Espera carajo que no me entra el pantalón". Luego vendría nuestra primera carcajada juntos después de 4 largos años.

No pasaron mas de dos minutos para verte sentada en mi sala tan linda como siempre, con esa sonrisa hermosa que ilumina todo a su alrededor, la misma que ví por primera vez hace ya casi 10 años una noche en la puerta de tu casa en Jesús María. Nos abrazamos como la ultima vez, nos abrazamos como siempre. Nos abrazamos como tù me enseñaste a hacerlo, nos abrazamos entrelazando corazones, diciédonos lo mucho que nos habíamos extrañado.

Esa tarde fue eterna y la pasamos como solo nosotros sabemos pasarla, conversando de la vida, riendonos como dos chicos de 10 años, conversando con la mirada y con los gestos. Nos tiramos en la alfombra como antes o hasta dirìa que la pasamos mucho mejor que antes y sé que tú al igual que yo fuiste feliz. No pasó mucho tiempo para que el hambre toque la puerta y la cena tendría que ser la de siempre: Un grasiento sanguchón como los que nos empujàbamos en La Aviaciòn con Angamos, en esos momentos no estàbamos cerca a esos locales pero felizmente lo tòxico tambien se vende por aquì cerca. "Mayonesa, golf, tártara, ketchup, aceituna y ají por favor, ah y bastane mayonesa que estamos a dieta".

Despúes de nuestra cena vegetariana fuimos a tu casa en micro (como creo no nunca lo habiamos hecho antes) y nos quedamos conversando en el parque hasta las 3 am. Todo pasò tan ràpido, como lo bueno suele pasar.

Nos vimos un par de veces mas, o mejor dicho fui feliz a tu lado en otras dos oportunidades.

Hoy teníamos que despedirnos pero el destino me jugó una mala pasada, perdí el celular y con èl tus números, tuve un día lleno de tareas y solo pensè en encontrarte en el Aeropuerto por lo que hace unas horas entré a la pagina web del Lima Airport Partners donde ví que el vuelo a Santiago salía hoy a las 9:55pm por lo que salì a las 7 pm de casa en mi auto arriezgándome a caer en una redada pues es sabado y no tengo licencia de conducir pero en el fondo sabía que nada me iba a ocurrir.

Estuve en el aeropuerto a las 8pm luego de buscar un lugar para parquear en las afueras pues la licencia de conducir es un requisito indispensable para poder ingresar y tremenda es mi desilusión al leer que tu vuelo salía a las 8:45. No podía ser!. Solo quedaba intentar una vez mas llamar al celular de tu mamá desde un telefono publico pues antes de salir me di cuenta que lo había apuntado en una tarjeta en mi billetera pero nadie contestó, camino por el primer piso buscando caras conocidas, pero nada. Solo me queda subir al 2do nivel para buscarte en la sala de embarque asì que tomo la escalera eléctrica y camino rápido por el pasillo de la derecha para al llegar a los restaurantes voltear hacia la izquiera hasta que veo una pantalla que indica las salidas internacionales que me dice: LAN Santiago (boarding).

No me averguenzo al decirlo, en esos momentos mucha tristeza corria en mi y muchos momentos de felicidad cruzaban mi mente mientras intentaba una vez mas buscar a alguien conocido entre la gente pero me dí cuenta que era de màs. Mientras tanto caminaba sintiendome solo, sin escuchar ni prestar atención a lo que ocurria a mi alrededor caminaba solo con esa mezcla de tristeza por lo que ocurria y felicidad x los recuerdos que espero podamos recordar juntos físicamente una vez màs.

Gracias mi angel por hacerme feliz estos dias, Gracias por abrir las ventanas de la oscura habitaciòn en la cual me encontraba, gracias por hacerme recordar lo lindo que puede ser la vida y que aún existen las buenas personas. Gracias por hacerme feliz y por hacerme creer que no todo es tan jodido en esta vida.

Gracias por cruzarte en mi camino una vez mas, gracias por hacerme saber que nuestra amistad va mas allà, mucho mas allá de todo.

Y como dice el gran Morrisey; there is a light that will never goes out. Nuestra luz, nunca se apagarà.